Durante más de dos horas de este 17 de septiembre René González Sehwerert dialogó con estudiantes cubanos y de otras nacionalidades en la Universidad de Ciencias Médicas de Ciego de Ávila.
Acompañado por su esposa, Olga Salanueva, el Héroe de la República de Cuba, contó a los jóvenes, muchos de la edad de su hija menor, Ivette, cómo su generación creció bajo la impronta de acciones terroristas contra nuestro país y que, cuando se les pidió, tanto a él como a sus compañeros, que dieran el paso de defender a Cuba en Estados Unidos, infiltrándose en aquellos grupos que tanto sufrimiento habían provocado, no lo dudaron un momento y aceptaron la misión.
René llamó a los estudiantes a no olvidar la historia y recordó las agresiones terroristas contra Cuba
René destacó la confianza de los Cinco en el apoyo de la Revolución y Fidel cuando fueron apresados y contó cómo se emocionó la primera vez que el Comandante en Jefe habló sobre ellos.
También se refirió a la importancia de la solidaridad del pueblo cubano y de amigos de todo el mundo, de las primeras cartas que recibió en prisión y como después fue numerosa la correspondencia que recibía desde los distintos rincones del planeta, lo que le ayudó a soportar su injusto encarcelamiento.
Olga Salanueva narró, con lágrimas en los ojos, los pormenores acerca de cómo se enteró de la misión de su esposo y los años de separación entre ellos.
A la pregunta de cómo se sintió al llegar a la Patria, René refirió que: “Cuando tú llegas de regreso a Cuba es como que nunca te fuiste, y la conexión es instantánea (...) Empiezas a relacionarte con la gente, a caminar por la calle y comprendes que estás en tu lugar”.
René y Olga junto a algunos estudiantes de Ciencias Médicas
Olga narró anécdotas de la dura separación 
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